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Cómo utiliza Mujeres RISE la aplicación de conocimientos para impulsar la política y la práctica

 

Esta aplicación es crucial para la investigación orientada al desarrollo, ya que cierra la brecha entre la investigación y su uso práctico en entornos concretos. La aplicación de conocimientos (también conocida como asimilación de la investigación, utilización de la investigación, investigación para la acción y transferencia e intercambio de conocimientos) está integrada en el diseño de los programas del IDRC. Su propósito es garantizar que los resultados de la investigación sean compartidos, interpretados e implementados por las partes interesadas, mejorando así la toma de decisiones, las políticas y los alcances obtenidos. En el IDRC, la aplicación de conocimientos se define como "los procesos de trasladar a la acción las pruebas generadas por la investigación, con el fin de lograr un impacto positivo en la resolución de los desafíos del desarrollo". 

El IDRC promueve un modelo de colaboración que facilita la aplicación de conocimientos, conectando a las partes interesadas a niveles globales, regionales y locales. Además, la organización impulsa modelos de cocreación, donde el diseño, la implementación y la asimilación de la investigación se desarrollan en conjunto entre los usuarios del conocimiento y los investigadores, lo que garantiza su relevancia y aplicabilidad.

La aplicación de conocimientos en acción en Mujeres RISE

La iniciativa Mujeres RISE está abordando los impactos de género del COVID-19 con el apoyo del IDRC, los Canadian Institutes of Health Research y el Social Sciences and Humanities Research Council. Una de las estrategias clave y únicas de aplicación de conocimientos implementadas por Mujeres RISE es la inclusión obligatoria de responsables de la toma de decisiones como coinvestigadores principales en los equipos de investigación de los proyectos. Esta estrategia ha probado ser efectiva, ya que estos responsables, que forman parte de grupos de interés esenciales en diversos niveles de gobierno, no solo validan los proyectos, sino que también incrementan la rendición de cuentas sobre los alcances y aportan ideas valiosas. Esto garantiza que los alcances de la investigación se alineen con las prioridades políticas.

Una de las estrategias clave de Mujeres RISE para la aplicación de conocimientos es la colaboración con una organización externa de investigación y políticas de salud (HPRO, por sus siglas en inglés). Esta institución independiente y no partidista se especializa en facilitar la movilización de conocimientos, el fortalecimiento de capacidades y la creación de redes entre los equipos de investigación. La HPRO colabora con los equipos de investigación en esfuerzos cruciales de aplicación de conocimientos, que incluyen el branding, la comunicación de los proyectos y la organización de talleres de colaboración e intercambio entre pares, entre otras actividades.

A nivel de los proyectos individuales, cada uno adopta diversas estrategias y tácticas de aplicación de conocimientos que se alinean con sus objetivos específicos, contextos operativos y públicos objetivos. Algunas tácticas son transversales, mientras que otras se diseñan de manera específica o personalizada para adaptarse a las necesidades particulares de cada proyecto.

Un proyecto de Mujeres RISE llamado ARISE & WIN se enfoca en comprender el impacto de género del COVID-19 en las jóvenes trabajadoras independientes de Nigeria. El objetivo del proyecto es coproducir soluciones que fomenten mejores sistemas y el bienestar. Para lograrlo, se cuenta con la participación activa de formuladores de políticas, investigadores y mujeres jóvenes trabajadoras independientes en todas las fases del proyecto, desde el desarrollo de la propuesta hasta su planificación y ejecución. A través de compromisos con las partes interesadas, incluidos talleres de coproducción de conocimientos, el enfoque de aplicación de conocimientos del proyecto ha fortalecido su teoría del cambio. Este enfoque también ha permitido identificar dos áreas clave para las intervenciones: el desarrollo de capacidades y la protección social. Además, algunas de las jóvenes trabajadoras independientes desempeñan el papel de consultoras entre pares, lo que proporciona información valiosa para la hoja de ruta de las intervenciones, al mismo tiempo que también aplican sus recién adquiridas habilidades para liderar acciones en sus comunidades.

El proyecto está capacitando a jóvenes trabajadoras independientes nigerianas en el uso de la narración digital para contar historias personales de resiliencia frente al COVID-19. Las jóvenes trabajadoras independientes están recibiendo capacitación en diversas áreas, incluidos conocimientos empresariales y financieros, derechos jurídicos y humanos, alfabetización digital, así como salud y bienestar. Los resultados del estudio señalan la urgente necesidad de un marco de protección social reestructurado en Nigeria, que ofrezca un mayor acceso al crédito y proporcione incentivos financieros para fomentar el ahorro. Esta mejora aumentará la resiliencia de las jóvenes trabajadoras independientes ante futuras crisis, contribuyendo así a fortalecer y volver más resiliente a la fuerza laboral femenina. Las intervenciones de protección social del proyecto se enfocarán en facilitar a las mujeres trabajadoras independientes el acceso a seguros de enfermedad y planes de ahorro.

Otro proyecto conocido como RE-CARE examina las necesidades de las trabajadoras de cuidados esenciales en Malasia para hacer frente a las vulnerabilidades del sector asistencial y aumentar la resiliencia ante futuras crisis. El proyecto colabora con los formuladores de políticas del Ministerio de Salud de Malasia para codiseñar e implementar investigaciones que atiendan las necesidades de las mujeres en la economía asistencial. Si bien la aplicación de conocimientos está integrada a lo largo de todas las etapas del proyecto, las principales estrategias de RE-CARE se enfocan en tres áreas clave:

  • participación de los medios de comunicación para sensibilizar al público sobre conceptos relacionados con el trabajo asistencial. De este modo, al difundirse los resultados, podrán contextualizarse adecuadamente.
  • involucrar a las partes interesadas para generar conciencia sobre los temas vinculados a los trabajadores asistenciales, garantizar la aceptación de la investigación y posicionarla como esencial para abordar las brechas de datos existentes. Este enfoque incluye la coproducción con las partes interesadas, incluidos miembros de la comunidad afectados (los cuidadores), así como la participación en conferencias y otros esfuerzos similares.
  • productos de políticas para compartir aprendizajes y hallazgos. El equipo del proyecto se reúne periódicamente con las partes interesadas relevantes para discutir las implicaciones políticas de los hallazgos de la investigación y elaborar informes de políticas. Además, mantienen encuentros periódicos con un comité técnico compuesto por funcionarios del gobierno y trabajadores asistenciales, quienes ofrecen apoyo consultivo sobre las cuestiones políticas que van surgiendo.
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Una mujer habla por el micrófono en una conferencia.
Institute of Strategic and International Studies, Malasia
Shazana Agha, coinvestigadora principal del proyecto RE-CARE, durante la presentación de un informe de políticas titulado "Construir una economía asistencial de la cuna a la tumba" en Malasia.

El proyecto RE-CARE adopta un enfoque distintivo en la aplicación de conocimientos al utilizar intermediarios externos en dos áreas fundamentales: medios de comunicación y política. Estos intermediarios, con su experiencia y redes establecidas, son capaces de conectar los hallazgos de la investigación con su audiencia objetivo.

A pesar de que los proyectos de Mujeres RISE han ajustado sus estrategias de aplicación de conocimientos para satisfacer las necesidades específicas de los proyectos y los alcances esperados, es posible identificar los siguientes puntos comunes entre las diversas estrategias:

  • Participación de las partes interesadas: Los proyectos de Mujeres RISE fomentan una colaboración constante entre investigadores y partes interesadas, incluidos responsables políticos, ONG y organizaciones de base. Esto asegura que la investigación se enfoque en corregir las brechas de políticas y en atender las prioridades de la comunidad.
  • Productos de conocimiento personalizados: Los proyectos de Mujeres RISE desarrollan productos de conocimiento personalizados (como informes de políticas, caricaturas y videos) que se ajustan a las necesidades de diversas audiencias. Esto facilita una asimilación más rápida por parte de responsables de la toma de decisiones y profesionales del sector.
  • Proceso participativo de cocreación: Los proyectos reconocen la importancia de cocrear el conocimiento e involucran desde el inicio a los usuarios, líderes comunitarios y funcionarios gubernamentales. Esta práctica garantiza que la investigación responda a necesidades prácticas y reales.
  • Inclusión de una estrategia de aplicación de conocimientos en cada fase del proyecto: La aplicación de conocimientos es una componente esencial en todas las etapas del ciclo de vida del proyecto. 

En Perú, el proyecto ANITA aborda los desafíos y limitaciones de las políticas de protección social dirigidas a trabajadoras del hogar. Emplea un enfoque de investigación-acción-participación, involucrando a los participantes en todos los aspectos del proceso, desde la formulación de preguntas de investigación hasta el diseño de métodos, el análisis de datos y la difusión del conocimiento. Este enfoque prioriza las voces y perspectivas de las trabajadoras del hogar, promoviendo su inclusión en los procesos de cocreación y asesoramiento. 

El proyecto creó dos comités participativos:

Comité de coinvestigadoras: Este grupo está compuesto por trabajadoras del hogar que comparten sus experiencias y perspectivas.  Colaboran estrechamente con el equipo de investigación para asegurar que los objetivos y métodos se alineen con las necesidades e intereses de las trabajadoras del hogar. Asisten a reuniones programadas donde debaten y aportan información relevante sobre la investigación, incluidos los datos clave que se deben recopilar, las técnicas de recolección y la difusión de resultados e informes.

Comité consultivo: Este comité está formado por trabajadoras del hogar, tanto actuales como antiguas, que son líderes o representantes de organizaciones del sector. Su participación será fundamental para mejorar la comprensión de las necesidades de los trabajadores, fomentar la apropiación a nivel individual y organizativo, garantizar la viabilidad de los procedimientos de investigación y facilitar la aplicación de conocimientos.

Además, el proyecto colabora con formuladores de políticas y académicos en un comité directivo.

Comité directivo: Este comité está compuesto por funcionarios que han ocupado roles, ya sea en la actualidad o en el pasado, en departamentos clave de instituciones públicas encargadas de velar por las condiciones laborales formales de las trabajadoras del hogar. Asimismo, incluye académicos que han realizado investigaciones o implementado programas relacionados con este sector.  Su participación refuerza la credibilidad del estudio, sus informes y las futuras recomendaciones, lo que desempeña un papel fundamental en el inicio de debates políticos basados en los hallazgos de la investigación. 

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Diagrama del proyecto ANITA.

Junto con estos comités, el proyecto ANITA emplea diversas tácticas de aplicación de conocimientos, que incluyen informes políticos, actividades de difusión, campañas en redes sociales y diálogos deliberativos. Estas estrategias buscan involucrar a las partes interesadas, promover la defensa de los derechos de las trabajadoras del hogar y difundir las recomendaciones de la investigación entre los públicos apropiados.

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Un grupo de personas sonríe y ríe alrededor de una mesa.
Proyecto ANITA
Durante una sesión de diálogo en Perú, los participantes presentaron recomendaciones cocreadas para mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras del hogar, involucrando a trabajadoras, académicos y funcionarios.

A medida que los proyectos de Mujeres RISE avancen en su fase de implementación y evaluación, los equipos de investigación continuarán aplicando estrategias de aplicación de conocimientos tanto a nivel de programa como de proyecto para respaldar los resultados obtenidos. Además, estos proyectos mantendrán su flexibilidad y garantizarán que la aplicación de conocimientos evolucione y se ajuste a los contextos cambiantes, lo que permitirá generar más oportunidades para influir en las políticas de salud y de género, así como fomentar un cambio sostenible.

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